El traje espacial sirve como protección para los astronauta, también se les conoce como «unidades de movilidad extravehicular», y cuestan millones de dólares. El objetivo del traje espacial es mantener con vida al astronauta. El traje espacial tiene un sistema que permite que el oxígeno circule por el interior del casco para que no se empañe, el casco es una protección contra la fuerte radiación y los micrometeoritos. Los micrometeoritos llegan a viajar a 27 mil kilómetros por hora.
Se puede distinguir entre tres capas, las exteriores protegen contra la radiación y los micrometeoritos que son pequeñas partículas de polvo espacial que dañarían la integridad de los astronautas pues su velocidad las convierte en balas; las capas intermedias se inflan para presionar el cuerpo del astronauta, y las capas interiores tienen un sistema que hace circular agua fría o caliente, ambas capas intermedias e interiores permiten mantener la temperatura de la sangre del astronauta. El traje espacial también tiene un sistema recolector de orina y otro de heces.
En la parte trasera del traje se coloca un sistema que suministra el oxígeno y elimina el dióxido de carbono, el depósito de oxígeno es para 7 horas. Los guantes tiene las puntas de silicón para que el astronauta pueda conservar el sentido del tacto.
El traje espacial no solo tiene un alto costo, otra de sus desventajas es el tiempo que lleva colocárselo, además de que resulta muy pesado, y los astronautas tiene que mantener una buena condición física durante los entrenamientos.
