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¿Qué es el liderazgo estratégico y por qué es clave?
El liderazgo es un factor esencial para que una organización se desarrolle y se distinga por su desempeño. Entre las tareas de un líder destaca definir la dirección de la organización, lo que se traduce en una visión clara de hacia dónde debe dirigirse. Un líder es capaz de comunicar efectivamente, motivando a las personas a emprender acciones congruentes con la visión. También predica con el ejemplo, identifica y articula el modelo de negocios con el que la organización alcanzará su visión.
Para mantenerse informados, los líderes aprovechan redes formales e informales de información, así detectan tendencias e inconsistencias. Los medios formales pueden estar sujetos a los intereses de aquellos que se resisten al cambio.
Los líderes delegan, no se sobrecargan de responsabilidades. Además, los subordinados se motivan cuando se les permite tomar decisiones, no hay que olvidar que son ellos quienes las implementan. Una empresa puede tener el mejor plan estratégico, pero son las personas las que lo hacen realidad. Sin embargo, un líder sabe reconocer qué decisiones no debe delegar, como articular la visión y el modelo de negocios.
En relación con sus ideas y propuestas, los líderes trabajan para generar consenso, no tratan de imponerse, buscan formar coaliciones, la unión hace la fuerza. Actúan como demócratas, no como dictadores.
No es necesario ser el director general para acumular poder, quien controle uno o varios recursos (ej. presupuestos, capital, puestos, información y conocimiento) tendrá la posibilidad de formar alianzas, las cuales le facilitarán alcanzar sus objetivos estratégicos.
Según Daniel Goleman, autor de Inteligencia emocional, los líderes emocionalmente inteligentes comprenden sus emociones y motivaciones, y su impacto en los demás; despiertan confianza; controlan sus impulsos, piensan antes de actuar; persiguen sus metas con ahínco; entienden los puntos de vista de los demás, considerándolos en la toma de decisiones; reconocen sus limitaciones; reflexionan sus decisiones; se sienten cómodos con la ambigüedad; están abiertos al cambio; son empáticos; remedian controversias entre las personas, etc.
Los líderes contagian pasión, logrando que las personas apoyen la visión común. Con sus habilidades, un líder guía a un futuro deseado, aprovechando el potencial único de cada persona.
Steve Jobs, Howard Schultz, Jack Welch, Jeff Bezos, Alfred P. Sloan y Lee Iacocca son reconocidos como grandes líderes empresariales. No obstante, el liderazgo no es exclusivo del ambiente empresarial, es posible reconocer líderes políticos, sociales, intelectuales, deportivos, etc. El liderazgo es situacional, los rasgos distintivos de un líder varían de un contexto a otro. Las características de un director de operaciones son diferentes a las de un director de ventas.
Los líderes formales son quienes ocupan posiciones de responsabilidad en la estructura organizacional. Sin embargo, líderes informales emergen, ya sea por su inteligencia, carisma o cualquier otra característica apreciada. Los líderes carismáticos se caracterizan por gozar de la simpatía de las personas, logrando que trabajen de manera entusiasta. Los líderes democráticos discuten ideas, recurren a procesos participativos, construyen consenso. El líder autocrático, contrapuesto al democrático, toma todas las decisiones, lo que puede producir incomodidad o molestia, las personas pueden relacionarlo con un liderazgo dictatorial. El líder paternalista, parecido al autocrático, toma las decisiones y utiliza mecanismos de recompensa y castigo.
Probablemente, la obra escrita sobre liderazgo que goza de mayor popularidad se titula Los siete hábitos de la gente altamente efectiva escrito por Stephen Covey.
Satya Nadella y su liderazgo estratégico en Microsoft
Satya Nadella se convirtió en CEO de Microsoft en 2014. Una de sus primeras acciones fue reformular la visión: Empoderar a cada persona y a cada organización en el planeta para lograr más.
Nadella ha sabido comunicar la visión de manera clara, explicando la necesidad de cambiar y cómo se entrega valor al usuario, lo que ha fortalecido la confianza de los inversionistas. También articuló el modelo de negocios, antes Microsoft se concentraba en vender licencias de software, Nadella decidió tomar una nueva dirección, un modelo de servicios y suscripciones en la nube basado en servicios como Azure, Microsoft 365 y Teams. Asimismo, delega en equipos con la libertad para innovar, pero responsables de sus resultados.