Ambas formas son correctas, pero tienen diferentes significados. Acechanza alude a una «persecución cautelosa».
Ejemplos:
- La acechanza es algo tenebroso.
- Sufrió las acechanzas de los periodistas.
- La presa se percató de la acechanza del cazador.
Asechanza es un «engaño con el fin de perjudicar a alguien».
Ejemplos:
- Su asechanza causó los daños que esperaba.
- Su asechanza ha fracasado.
- La asechanza familiar es censurable.
- La asechanza laboral disminuye la colaboración.
Puedes verificar la información en el Diccionario panhispánico de dudas.