Selección de frases célebres cortas de Honoré de Balzac.
- La ignorancia es la madre de todos los crímenes.
- El corazón de una madre es un abismo profundo en cuyo fondo siempre encontrarás perdón.
- El amor no es sólo un sentimiento. Es también un arte.
- En las grandes crisis, el corazón se rompe o se curte.
- En la venganza el más débil es siempre más feroz.
- La resignación es un suicidio cotidiano.
- No existe el hombre que haya podido descubrir el medio de dar un consejo de amigo a una mujer, ni siquiera a la suya.
- Es necesario ser casi un genio para ser un buen marido.
- Quien sabe gobernar a una mujer sabe gobernar un estado.
- El amor es la poesía de los sentidos.
- El amor es la eterna historia del juguete que los hombres creen recibir y del tesoro que las mujeres creen dar.
- El amor aborrece todo lo que no es amor.
- Lo que hace indisoluble a las amistades y dobla su encanto, es un sentimiento que le falta al amor, la certeza.
- La mujer es una criatura encantadora capaz de quitarse el corazón con la misma facilidad que un guante.
- Las mujeres tienen de común con los ángeles esta cualidad: los seres que sufren son patrimonio suyo.
- El matrimonio une de por vida a dos seres que no se conocen.
- La mujer es para su marido tal como éste la ha hecho.
- La mujer es coqueta mientras no ama.
- Si el amor es la mayor de las pasiones es porque las reúne a todas en sí.
- El amor que nace de repente es el más largo de curar.
- ¿De cuántas infamias se compone un éxito?
- Puede uno amar sin ser feliz; puede uno ser feliz sin amar; pero amar y ser feliz es algo prodigioso.
- Detrás de cada gran fortuna hay un delito.
- La mediocridad no se imita.
- El matrimonio debe combatir sin tregua un monstruo que todo lo devora: la costumbre.
- El amor es la única pasión que no admite pasado ni futuro.
- Jamás en la vida encontraréis ternura mejor, más profunda, más desinteresada ni verdadera que la de vuestra madre.
- Un periódico no está hecho ya para ilustrar, sino para halagar las opiniones. Por ello, dentro de un tiempo, todos los periódicos serán viles, hipócritas, infames, mentirosos, asesinos; matarán las ideas, las filosofías y a los hombres, y florecerán por eso mismo.
- El periódico es una tienda en que se venden al público las palabras del mismo color que las quiere.
- Los seres más sensibles no son siempre los seres más sensatos.
- Es mucho más fácil quedar bien como amante que como marido, porque es mucho más fácil ser gracioso e ingenioso de vez en cuando que todos los días.
- Un libro hermoso es una victoria ganada en todos los campos de batalla del pensamiento humano.
- El pudor es una virtud relativa, según se tengan veinte, treinta o cuarenta y cinco años.
- Sucede con frecuencia que la posesión mata los más grandes poemas del deseo, a cuyos sueños corresponde raramente el objeto poseído.
- Las mujeres abandonadas son las que simplemente aman; las conservadoras son las que saben amar.
- Instruida, la virtud calcula tan bien como el vicio.
- Es tan absurdo pretender que un hombre no puede amar siempre a la misma mujer, como si un violinista no puede tocar siempre el mismo instrumento.
- El anciano es un hombre que ya ha comido y observa cómo comen los demás.
- El glotón es el sujeto menos estimable de la gastronomía, porque ignora su principio elemental: ¡El arte sublime de masticar!
- En un marido no hay más que un hombre; en una mujer casada hay un hombre, un padre, una madre y una mujer.
- La gente termina siempre por condenar a los que acusa.
- Un buen marido nunca es el primero en dormirse por la noche ni el último en despertarse por la mañana.
- La burocracia es una máquina gigantesca manejada por pigmeos.
- El encono de ciertas mujeres contra las que tienen la desgracia de amar es una prueba del daño que hace, interiormente, la castidad.
- La ingratitud proviene, tal vez, de la imposibilidad de pagar.
- El instinto de la mujer equivale a la sagacidad de los grandes hombres.
- La desgracia crea en ciertas almas un vasto desierto en el que resuena la voz de Dios.
- Lo que el genio tiene de bello es que se parece a todo el mundo y nadie se le parece.
- El tiempo es el único capital de las personas que no tienen más que su inteligencia por fortuna.
- Elegancia es la ciencia de no hacer nada igual que los demás, pareciendo que se hace todo de la misma manera que ellos.
- Un efecto esencial de la elegancia es ocultar sus medios.
- La gloria es el sol de la muerte.
- La gloria es un veneno que hay que tomar en pequeñas dosis.
- Existen en nosotros varias memorias. El cuerpo y el espíritu tienen cada uno la suya.
- El poeta no es la poesía, como el grano no es la flor.
- No hay dolor que el sueño no pueda vencer.
- Ser celoso es el colmo del egoísmo, es el amor propio en defecto, es la irritación de una falsa vanidad.
- La mujer más virtuosa siempre tiene algo dentro de ella que no es completamente casto.
- La mujer es la reina del mundo y la esclava del deseo.
- Ceder a un vicio cuesta más que mantener una familia.
- La mujer se burla de los hombres como quiere, cuando quiere y mientras quiere.
- Una mujer virtuosa tiene en su corazón una fibra menos que las demás mujeres. O es estúpida o sublime.
- Puede que la virtud no sea sino la urbanidad del alma.
- El amor crea en la mujer, una mujer nueva; la de la víspera ya no existe al día siguiente.
- Lo verdaderamente mágico de nuestro primer amor es la absoluta ignorancia de que alguna vez ha de terminar.
- Todo poder es una conspiración permanente.
- Ningún hombre debe casarse hasta haber estudiado anatomía y haber hecho la disección por lo menos de una mujer.
- El arte nace en el cerebro y no en el corazón.
- No se es amigo de una mujer cuando se puede ser su amante.
- Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir.
- El dolor ennoblece incluso a las personas más vulgares.
- La igualdad tal vez sea un derecho, pero no hay poder humano que alcance jamás a convertirla en hecho.
- Cuando un hombre dice a una mujer que la ama, ella, por poco sólidas que le parezcan las bases de este sentimiento, sin razonarlo se siente impulsada a tomarlo por verdadero. Lo cree siempre.
- El bruto se cubre, el rico se adorna, el fatuo se disfraza, el elegante se viste.
- Los que no tienen hijos ignoran muchos placeres, pero también se evitan muchos dolores.
- En las mujeres, el instinto equivale a la perspicacia de los grandes hombres.
- Cuando un hombre pega a su amante inflige una herida; cuando pega a su esposa es un suicidio.
- ¿Es que se acaba de amar alguna vez? Hay gente que ha muerto ya y que yo siento que aman aun.
- No existen grandes talentos sin gran voluntad.
- En el naufragio de la embriaguez, puede observarse que lo único que sobrenada es el amor propio.