Agustín de Hipona, mejor conocido como San Agustín, fue un sacerdote y santo católico. Nació en Tagaste, actualmente Souk Ahras en Argelia el 13 de noviembre de 354.
Fue hijo de un hombre llamado Patricio y de Santa Mónica. En su juventud se destacó por su gusto y habilidad para las letras, la filosofía y la retórica. Es, también, en su juventud que conoce a una mujer de la que se desconoce su nombre y con la que procreó a Adeodato. Durante esta época, estudió diversas corrientes filosóficas, optó por profesar el maniqueísmo.
En el año 383 parte a Roma, ahí conoció a Ambrosio de Milán que se convirtió en San Ambrosio. El obispo Ambrosio lo introduce a los escritos de Plotino y a los de Pablo de Tarso, finalmente, se convierte al cristianismo, lo que regocijó a su madre que había ido a vivir con él, pues le había inculcado la religión cristiana desde niño.
Fue bautizado por el obispo Ambrosio el 24 de abril de 387, entonces, decidió regresar a África, pero, desafortunadamente, su madre falleció cerca de Roma.
Al llegar a Tagaste, vendió sus bienes y el dinero lo repartió entre los pobres. En 391 viajó a Hipona, actualmente Annaba e Argelia, donde se consagró sacerdote, cuatro años después era obispo.
Las obras de San Agustín lo colocan, junto con Ambrosio de Milán, Gregorio Magno y Jerónimo de Estridón, como uno de los cuatro Padres de la Iglesia.
Falleció el 28 de agosto de 430.
En su doctrina estableció que:
- Para creer hay que comprender y que para comprender hay que creer.
- La certeza se encuentra en la interioridad.
- Dios se encuentra en lo más íntimo de cada uno.
- La completa abstinencia es más fácil de lograr que la moderación.
- El maniqueísmo, el donatismo, el pelagianismo y el arrianismo son herejías.
- El mal no es una realidad, más bien es una ausencia de bien.
- Los seres humanos son racionales y tienen la posibilidad de elegir entre el bien y el mal.
- Quien posee superficialidades, posee los bienes de otros.
Entre sus obras se tienen:
- Confesiones
- Contra la mentira
- Contra los académicos
- Cuestiones diversas a Simpliciano
- De la fe en lo que no se ve
- De la verdadera religión
- El combate cristiano
- El libre albedrío
- El maestro
- El orden
- El trabajo de los monjes
- La bondad de la viudez
- La bondad del matrimonio
- La ciudad de Dios
- La continencia
- La dialéctica
- La dimensión del alma
- La fe y el símbolo de los apóstoles
- La fe y las obras
- La inmortalidad del alma
- La mentira
- La música
- La paciencia
- La piedad con los difuntos
- La santa virginidad
- La Trinidad
- La utilidad de la fe
- La vida feliz
- Retractaciones